Además, hay varias entidades internacionales que certifican que la gestión realizada se ha hecho siguiendo unos criterios de sostenibilidad, y esto se acredita otorgando un sello, tanto a las superficies forestales, a las empresas y a los productos obtenidos como resultado de un proceso industrial en el que la madera procede de bosques gestionados de forma sostenible.
Las dos entidades con mayor reconocimiento a nivel europeo y que son las que certifican en España son FSC y PEFC.